Para mi sorpresa, en esa misma reunión él extrajo, de su vasto archivo personal de investigación histórica-religiosa, dos documentos claves que confirmaban la declaración que Granada es «puerta a las naciones». El primero es un documento traducido del inglés al español del profeta Rick Ridings titulado «Una Visión de Cuatro puertas antiguas» (1997). En la que el profeta comparte una visión que Dios le dio sobre cuatro puertas, en cuatro diferentes lugares. Y el segundo, de un artículo de un periódico local de Granada titulado «El Salón: imagen y símbolo de la ciudad» (2006), en el que un historiador español confirma la importancia histórica, política, cultural y religiosa de estas cuatro ciudades: Granada, España; Roma, Italia; Atenas, Grecia; y Jerusalén, Israel.
LA COMISIÓN
En enero del 2009, continué con la agenda de intercesión profética que el Señor puso ante mí, junto con el equipo misionero que me acompañaba, para bendecir a Granada y desatar todo lo que Él tiene preparado para esa ciudad. Y en junio del 2009, ya culminando ese proceso de intercesión, el Señor me indicó que Él quería que fuera a las otras Puertas, para orar y cerrar toda obra e influencia del reino de las tinieblas sobre las naciones y para abrir un río de revelación que Él quiere traer sobre los intercesores y profetas, sobre Su Iglesia.
Desde ese año el Señor me comisionó a cumplir con una agenda de intercesión en estas cuatro ciudades, de la manera siguiente: Granada en el 2009, Roma en el 2010, Atenas en el 2011 y Jerusalén en el 2012.
LA PUERTA DE LA AL-HAMBRA, GRANADA, ESPAÑA
La Puerta de la Justicia y la Fuente o Pilar de Carlos V, a la entrada de la fortaleza de la Al-Hambra, fueron los primeros sitios donde el Señor quiso que comenzáramos este itinerario de intercesión profética a favor de Su reino sobre las naciones de la tierra.
Granada es una Puerta con tres bisagras, que afectaron el curso de la historia de las naciones y del pueblo judío. En el año 1492, los reyes católicos conquistaron a Granada, el último bastión musulmán en territorio español y de Europa occidental; también los reyes católicos aprobaron las capitulaciones que le permitieron al navegante Cristobal Colón embarcarse en la misión de encontrar una nueva ruta de navegación hacia India, que se tornó en el descubrimiento de un nuevo continente; y ese mismo año, los reyes católicos expulsaron y persiguieron a los judíos en todo el territorio de España, dando un duro golpe a los judíos exiliados en lo que era considerado «el fin del mundo». Estos tres eventos históricos sirvieron para cerrar una vieja época «la Edad media» y abrir otra nueva «la Edad moderna», con sus ventajas y desventajas.
LA PUERTA DEL ARCO DE TITO, ROMA, ITALIA

El Arco de Tito, la segunda Puerta de influencia mundial, que se erigió para conmemorar la destrucción y saqueo de la ciudad y el templo de Jerusalén, en el año 70 d.C, por medio de las tropas romanas conducidas por el general Tito, representa la victoria total de un imperio gentil sobre el reino de Judá, que hasta la fecha era el remanente del reino de Israel.
Roma igualmente fue una Puerta que afectó el curso de la historia de las naciones y del pueblo judío, tal como fue profetizado por el profeta Daniel aproximadamente cinco siglos antes. Consolidó la expansión del poderío militar romano; esparció la cultura y religión griega; y provocó el mayor exilio de toda la historia de los judíos de Israel a todos los rincones de las naciones, dejándolos sin patria ni su símbolo de orgullo y estabilidad religiosa: el Templo.
LA PUERTA DE ADRIANO, ATENAS, GRECIA
El Arco de Adriano (emperador romano que refundó a Atenas) o también llamada Puerta de Atenas, se encuentra a la entrada del monte del Acrópolis, donde fueron edificados los templos más importantes dedicados a Palas Atenea, la patrona de la capital de Grecia y símbolo de la sabiduría y del conocimiento de la cultura occidental.
Atenas, junto con Corinto, igualmente sirvió de Puerta a las naciones, como encrucijada a las naciones, que permitiría el encuentro y unión de los viejos mundos de Europa y Asia; su idioma, su filosofía, su religión y su cultura en general influyeron profunda y ampliamente todos los rincones de la tierra, en especial a los persas, en un primer momento, y luego a los romanos; y estos a ella en viceversa. Ambos bloques fueron grandemente influenciados desde y por Atenas.
Y el espíritu de la falsa profecía promovido por el culto a Palas Atenea y a Apolos se convertiría, desde entonces y hasta el final de los tiempos, en el archienemigo de la alabanza y la profecía bíblica proclamada por los hijos de Sión, el pueblo escogido por Dios. Y por medio del ejército griego, ocurrió la primera profanación y posterior destrucción del Templo.
PUERTA DORADA ORIENTAL, JERUSALÉN, ISRAEL
Y la cuarta Puerta antigua de influencia mundial es Jerusalén, representada por la Puerta dorada oriental, así llamada por los cristianos, que daba acceso al monte del Templo; también era llamada por los judíos como la Puerta de la misericordia; por los árabes como la Puerta de la vida eterna; y antiguamente también conocida como la Puerta hermosa.
Es difícil resumir aquí la influencia de Jerusalén, pero siguiendo el hilo de pensamiento que nos ocupa en esta breve entrega podemos señalar que Jerusalén ha influenciado las tres grandes religiones monoteístas: Judaísmo, Cristianismo e Islamismo. Desde su suelo, todos los grandes imperios antiguos pasaron y fueron influenciados, pero a su vez, sus pobladores también fueron influenciados por los reinos de Egipto, Canaán y Babilonia, llegando a ser promotores y portavoces de creencias y prácticas paganas que aún se siente su efecto en las naciones, tales como el culto a la reina del cielo, a Baal, a Asera y a Moloc.
Y también desde Jerusalén, tanto de manera directa como indirecta, representantes religiosos, políticos y económicos del pueblo judío han sido promotores del actual paganismo que se ha infiltrado desde el exilio babilónico, y desde la época de los templarios hasta la presente versión de la masonería mundial, a todos los reyes, dignatarios y poderosos de la tierra, que persiguen la instauración del sistema babilónico mundial con el nombre de Nuevo Orden Mundial.
Por estos pecados de desobediencia y abierta rebelión, el único y verdadero Dios juzgó y juzgará a Su pueblo y a las naciones de la tierra, que siguen a la serpiente antigua y su imperio de tinieblas e iniquidad. Y lo hará desde Jerusalén hasta los confines de la tierra.
Esa será nuestra tarea, preparar el camino al Señor para que Sus juicios decretados sean ejecutados y Sus bendiciones y favores sean mostrados sobre todos aquellos que teman Su Nombre y adoren a Su Hijo, el cordero de Dios. Y compartir toda la revelación, todos «los tesoros escondidos y los secretos bien guardados» que el Señor tenga a bien compartir, para que los intercesores y profetas de Dios, puedan con mayor conocimiento, sabiduría y revelación del Espíritu hacer intercesión y alabanza profética y el reino de Dios venga sobre la tierra, a todas las naciones, y sea hecha Su voluntad en la tierra, así como en el cielo.
Hay guerra, viene guerra, como no lo ha habido antes en la historia de las naciones.
Se están sacudiendo, y se van a sacudir aún más, todas las naciones de la tierra, para que se manifieste el reino inconmovible del Señor de los ejércitos.
Ya hay revelación, pero aún viene más revelación para que los hijos de la luz, los entendidos del Señor, puedan caminar y ministrar en los días más oscuros y terribles que la historia de la humanidad haya podido jamás imaginar.
«En aquel tiempo se levantará Miguel, el gran príncipe que está a favor de los hijos de tu pueblo; y será tiempo de angustia, cual nunca fue desde que hubo gente hasta entonces; pero en aquel tiempo será libertado tu pueblo, todos los que se hallen en el libro.
Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.
Y los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad.
Pero tú, Daniel, cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin. Muchos correrán de aquí para allá, y la ciencia aumentará.
Anda, Daniel, pues estas palabras están cerradas y selladas hasta el tiempo del fin.
Muchos serán limpios, y emblanquecidos y purificados; los impíos procederán impíamente, y ninguno de los impíos entenderá, pero los entendidos comprenderán.»
Daniel 12:1-4, 9-10
«Y él me dijo: no selles las palabras de la profecía de este libro, porque el tiempo está cerca.